Tú ahí, yo aquí
tan lejos de ti,
que mi mente
no me deja vivir.
Sueño con tus besos,
vivo con tu recuerdo,
e intento enmendar el error
de no haber sabido
trepar tu colchón...
aunque fuese de cartón,
y al final sólo quedaríamos tu yo.
Nada fue fácil,
pero tampoco imposible.
Nadie nos obligó a dejarlo,
y ahora aquí nos encontramos...
solos los dos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario